El 5G ayuda a minimizar los riesgos durante la conducción de vehículos autónomos

Aumentar la seguridad durante el tránsito de vehículos sin conductor es uno de los grandes retos a los que se enfrenta la conducción autónoma

Para conseguir una circulación segura es necesario que los vehículos autónomos dispongan de una tecnología que les permita anticiparse a los contratiempos que surjan durante el camino. En este sentido, el uso del 5G puede resultar clave.

Dentro de este contexto, el proyecto 5G Cataluña ha puesto en marcha una prueba piloto utilizando un vehículo geolocalizado y conducido que, gracias a la baja latencia, ha recibido rápidamente la información necesaria para poder adelantarse al peligro y evitarlo.

La demostración, que se ha llevado a cabo en la playa del Somorrostro de Barcelona, constata que el 5G supone una solución fiable e innovadora para potenciar la seguridad durante la conducción de vehículos autónomos. 

La tecnología utilizada incorpora estándares de comunicación 5G sobre la red desplegada por Cellnex, con las frecuencias de MásMóvil, que facilitan la comunicación entre distintos dispositivos autónomos, dentro del protocolo V2X. El vehículo recibió en directo información e imágenes de alta calidad sobre incidencias, obstáculos o alteraciones en el tráfico durante su recorrido, lo que hizo posible reaccionar con rapidez y anticipar una respuesta al posible riesgo.
La Fundación i2CAT, bajo la dirección de Parlem, ha aportado las aplicaciones para el reconocimiento de imágenes de AI y las de comunicación vehicular, que han sido alojadas en el servidor edge computing de Lenovo. Desde Nae nos encargamos de la gestión del proyecto, impulsado por Red.es, dando soporte a los miembros de la UTE, especialmente a la gerencia, mediante la gestión de la planificación, governance, riesgos y calidad.

Puedes ver el vídeo de la demostración aquí: